martes, 22 de septiembre de 2009

POEMA ENTRELÍNEAS

Como cumpliendo condena, me siento a escribir o me dispongo a pintar.
Me siento convocada constantemente ante el llamado de la producción.
Intento buscar en el recóndito espacio al que ni las palabras ni los colores llegan, esa es mi lucha con la propia obra.
Será que en el fondo le temo a la locura y dudo si lo que veo lo estoy viendo, y dudo si lo que escucho lo escucho, porque entonces...
Será que además le temo a la muerte y me apremia la necesidad de producción.
Será que tengo una suerte de sobre-estímulos visuales, afectivos... tantos que necesitaría otro cuerpo, u otra existencia, quien sabe si será.
Será que le temo al género humano.
Será por eso que me acuno en lo que humildemente escribo y despiadadamente pinto...
La elegancia de esta danza narcisista de mi yo con lo que necesito expresar es como el coqueteo de aquello que me aturde con mi incapacidad de desahogar el aturdimiento.
O como dijo Walt Whitman: Si no son el enigma y la solución del enigma... no son nada. Ese es mi mayor desdén... todo lo que escribo o pinto es nada.
O al menos, nada me conforma o sacia, o alivia.



Hay cigarrillos en el cenicero
y hay algo de humo
Hay ropa de cama revuelta
y medias en el piso,
Hay un par de cuadros en la pared
mi hábitat
Hay libros con marcas entre sus hojas
las imágenes.
En los chillidos intelectuales
Soy desnuda
Hay platos sucios en la cocina
lo que he comido.
Hay angustias arcaicas
Y me desgarro
Hay medicación pendiente
por mis dolores
Hay llamadas perdidas por ahí
la gente me busca
Sé de las guerras
aún cuando yo no era
Sé de los escándalos de la represión
y no me puedo esconder
Sé de los escándalos de la iglesia
del eros.
Sé además otras tantas...
La desilusión y la decepción
Sé de metáforas pictóricas
de mi misma.
Sé de otros nacimientos
Y me encuentro también
Creo saber de otros aires
en las cumbres
Creo saber de otra vegetación y
de mi sangre.
Creo saber que afuera cae agua
Indiferente
sobre los árboles, sobre los autos,
apenas contemplo
las casas, la gente y los bichos,
todo eso que me apena.
Del resto...
nada sé.
Mina
22/09/09