lunes, 22 de febrero de 2010

Cambio climático

e-, p+ y n

Bipolar.com

Jirafa al sol

UNA NOCHE CON AMIGAS Y UNA FLOR

Después de tanto vals en el pensamiento, tanto estilo vaivén, tanto de vez en cuando... Y palabras que empalidecen lo cotidiano, hizo finalmente su aparición.
Como si supiera cuánto la necesitábamos, una noche se nos mostró, se dejó ver con soberbia. Se abrió únicamente para atraernos en ese momento y pronto partiría quién sabe a dónde...
Todas nosotras, bajo la oscura noche, nos emplazamos cerca de semejante belleza. Entonces, los compases de vals fueron mas esporádicos y el vaivén mas pequeño...
Tampoco sé muy bien por qué, pero esa noche para todas nosotras fue distinta, profunda, comprometida, bella y cargada de amor como esa flor.

martes, 16 de febrero de 2010

No sé que pasa, ya no puedo escribir.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Realidades como puntos en el universo...

Mis ojos han detenido mi tiempo al mirarla tan compulsivamente.
Puedo dibujar cada gesto, el primero, el alto, el de madrugada, o el arrugado, o el amarillo, he decidido clasificarlos por cualidades, números y colores. (Se sabe que algo o bien es rojo o bien es 3, pero difícilmente sea rojo y 3 a la vez).
Bueno, todos son de una ternura infinita, por lo general a lo largo del día vira del azul al verde, se va aclarando, por las tardes descansa en la palma de mi mano derecha, y ahí se pone un poco de gesto amarillo. Un color de estado agónico.
Llevo gran parte de mi vida estudiándola, y algo conozco... conserva esa medida pequeña, decir centímetros sería una locura, no puedo irrespetuosamente faltar al orden que yo misma le he dado. Es pequeña como un número decimal incompleto...
Es como una media médula en medio del pavimento, y quiero decir que no es casi nada.
Es un punto en medio del universo, pero con millones de rectas que la atraviesan.

Cuán pequeña es la mirada de la pequeña existencia?

Yo sin embargo acaricio lo diminuto y beso su dedo inquisidor...

Si no abarca más que un costado exiguo de realidad de las cosas, esa porción pequeña de realidad que da igual que no lo sea. Ojos ínfimos sobre una realidad parcial. De que realidad me dejo acosar?

En tanto se asoma en mi vida, es toda mi realidad. En tanto me mire, me mira para siempre. En tanto yo diga que me mira, me mira para siempre. En tanto evoque ojos hidrópicos de Oliverio, me dejo poseer por ellos.
Como el mar que se agita ni bien alguien se para delante, que se hace oír ni bien alguien se dispone a hacerlo.
Como yo que escribo mientras digo que estoy escribiendo, y sólo por eso lo sigo haciendo, y así como Alejandra, la noche se va tejiendo.
Así de pequeña es su existencia.

Es que tal vez no sea más que un sueño, las alucinaciones de las cosas que he amado, las palabras que me dijiste y te olvidaste. Tal vez ahora mismo todos los vasos volcados vuelven a su posición junto con el líquido derramado y todo queda exactamente donde el principio de las cosas. La sospecha de esta corrección lineal del tiempo y el destino es la que me acosa. Sus voces, sus noches, las ausencias de personas que no han sido. Presumir otras realidades me transtorna. Hilos invisibles como ejes de realidades imperceptibles, hacia abajo o a mi costado, otro tiempo hacia arriba, o un espacio más lento.
Soy como una media médula en medio del pavimento.

Todas las materialidades se presagian a partir de la certeza de cada pequeña existencia que me nombra con los ojos y entonces soy suya y en fin... soy.

martes, 2 de febrero de 2010

Voces antiguas



Hay secretos míos que el río se ha llevado,
y lo que me pidió lo voy cumpliendo
poco a poco en la tierra.
P. Neruda